Comunidades y pueblos indígenas del Pacifico, Centro y Norte de Nicaragua y ciudadanía se solidariza a través de una campaña en redes sociales con líderes de la Comunidad Indígena Salinas de Nahualapa del municipio de Tola, departamento de Rivas, acusados por injurias y calumnias tras denunciar en redes sociales la trama existente para expropiar su territorio.
El presidente de la Junta Directiva, Miguel Salinas, la lideresa Ana Félix Duarte y el Vice coordinador del Consejo de Ancianos, Arturo Guzmán deberán presentarse en audiencia este miércoles trece de enero en los juzgados de Tola para enfrentar la causa.
La demanda fue interpuesta en noviembre del 2020 por el abogado Aurelio Palacios Escobar, en representación del empresario estadounidense Philip Bryson Christopher, principal inversionista de La Flor de Mayo de Nicaragua Sociedad Anónima, entidad que impulsa proyectos turísticos en áreas de la comunidad indígena e incluso ofrece la venta de lotes de terrenos a extranjeros.
Lo que dice el liderazgo comunitario
El liderazgo comunitario demandado sostuvo en el mencionado video que existe una práctica de venta ilegal de tierras indígenas, por medio de escrituras públicas y el desconocimiento de las autoridades tradicionales, en abierta violación al marco legal vigente que prohíbe dichas transacciones.
Por ejemplo, la ley del 26 de junio de 1935 prohíbe a los municipios de la República “la venta, enajenación y gravamen de sus terrenos ejidales por ningún motivo, pudiendo solamente darlos en arriendo, en uso o habitación, y según el Artículo 3 de la misma, “Las disposiciones de la presente ley son también aplicables a los terrenos de las comunidades indígenas”.
En ocasiones organizaciones propias de las comunidades indígenas se ven envueltas en conflicto de compra y venta de tierras, pero La Ley del 3 de junio de 1914, en su artículo siete, inciso (a), dice que es prohibido a las Juntas Directivas, vender los terrenos pertenecientes a la comunidad.
Lo anterior debería ser claro para agentes vendedores, compradores, notarios y funcionario de gobierno que cualquier trámite de esta naturaleza es ilegal. No obstante, las instancias judiciales incluso celebran juicios de disputa sobre tierras indígenas en todo el país.
Ineter dio razón a Comunidad Indígena
Otro argumento que utilizan quienes trafican con tierras indígenas en Salinas de Nahualapa es que los lotes que ofertan e incluso negocios turísticos que operan están fuera del límite del territorio indígena. Sin embargo, el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) estableció en el 2009 la demarcación del territorio el que colinda con playas como Sardinas, considerada una de las mejores a nivel internacional para practicar el surf.
En el caso de Flor de Mayo, el dictamen de Ineter dice que: “La finca rústica denominada Las Sardinas adquiridas por la empresa Flor de Mayo” está dentro de los límites de la comunidad. Pese a ello, los inversionistas se niegan a devolver las tierras que incluso vigilan con hombres armados que con disparos a quienes se atreven a transitar por las mismas.
Los mensajes de solidaridad
La campaña de apoyo al liderazgo de Salinas de Nahualapa se lanzó este lunes 11 de enero con las etiquetas #lastierrasindìgenasnosevenden y #ResistenciaIndigenaNicaragua y ha sido acogida por sectores pro-indígenas y líderes de otros pueblos y comunidades. La misma se sostendrá mientras dure el proceso.
La lideresa de la Comunidad Indígena La laguna de Matagalpa, una de las promotoras de la campaña calificó la demanda como una flagrante injusticia en contra del pueblo indígena Salinas de Nahualapa.
“Al momento estoy viendo que las autoridades de Tola, Rivas, están parcializándose a favor del extranjero. Están dándole la espalda a los dueños de la tierra”, afirmó.
Agregó que el Convenio 169 de la OIT, sobre pueblos indígenas y tribales y que ha sido reconocido por el Estado de Nicaragua, otorga la responsabilidad del Estado mismo de proteger y salvaguardar los derechos territoriales de los pueblos originarios. “En el caso de las autoridades judiciales de (Tola) Rivas se espera que cumplan ese mandato”, apuntó.
Por su parte, el Movimiento Indígena de Nicaragua (MIN) hace un llamado a las autoridades judiciales a respetar los derechos indígenas y de oficio imponer el imperio de la ley para proteger las tierras indígenas de la Comunidad Salinas de Nahualapa y de otros pueblos indígenas de esta parte del país que constantemente son asediados por quienes pretenden adueñarse del territorio.
Así mismo demandan que en el Pacífico, Centro y Norte de Nicaragua se regulen las emisiones de escrituras públicas que se refieren a la venta de tierras indígenas como se hace en caribe nicaragüense, ya que de ninguna manera pueden considerarse válidas, por el contrario, dan pie para encausar a quienes trafican con el territorio indígena.
